La situación de Siria me tiene realmente roto... Siempre que se habla de un "ataque militar" generador de muerte, de violencia y de destrucción –me da igual que sea químico o no– me rompo interiormente porque lo siento como un gran fracaso de la humanidad...
¿Hasta cuándo vamos a seguir siendo incapaces de encontrar la luz y la luminosidad de la PAZ a través del diálogo, de la conciliación, de la concordia?
Pensando en todo esto; en estos nuevos momentos en los surge la amenaza, prácticamente inminente, de una nueva barbarie y destrucción –un nuevo fracaso–, me han venido a la memoria las palabras con las que RAFAEL ALBERTI introduce su libro "Fustigada luz":
«Nacemos en la luz, la queremos, la quisiéramos siempre. Porque tenemos ojos que ven, que ven aunque cerrados, aunque ciegos. Vamos a la luz en lo oscuro, en la tiniebla más tremenda, podemos verla, desearla, bracear como en el abismo submarino mas profundo en busca de ella. Porque la luz está allí, siempre allí, allá arriba, en lo alto, o en la sima más honda, al alcance de todos. Pero sucede que la luz –como diría León Felipe– hay que ganarla: “Ganarás la luz”. Pero hoy, tiempos feroces de condena y desprecio, hay más que nunca que luchar, por ella, combatir hasta las últimas ansias por alcanzarla, liberarla del castigo en que vive, de la tortura, los golpes, la violencia». (Rafael Alberti. “Futigada luz”).
![]() |
Rafael Alberti. |
«Nacemos en la luz, la queremos, la quisiéramos siempre. Porque tenemos ojos que ven, que ven aunque cerrados, aunque ciegos. Vamos a la luz en lo oscuro, en la tiniebla más tremenda, podemos verla, desearla, bracear como en el abismo submarino mas profundo en busca de ella. Porque la luz está allí, siempre allí, allá arriba, en lo alto, o en la sima más honda, al alcance de todos. Pero sucede que la luz –como diría León Felipe– hay que ganarla: “Ganarás la luz”. Pero hoy, tiempos feroces de condena y desprecio, hay más que nunca que luchar, por ella, combatir hasta las últimas ansias por alcanzarla, liberarla del castigo en que vive, de la tortura, los golpes, la violencia». (Rafael Alberti. “Futigada luz”).
En estos tiempos feroces –¡es verdad!–
hay, más que nunca, que luchar por la luz...
... liberarla del castigo en que vive,
de la tortura, los golpes, la violencia...
... Así pues, aún estando roto, seguiré luchando por la PAZ...
... ¡Seguiremos luchando por la PAZ!...
... ¡TENEMOS QUE GANARLA en la luz, sin ferocidades!